Mucho se ha oído hablar del método Six Sigma y su uso tan extendido en sectores como automoción y aeronáutica. Sin embargo, en los procesos continuos como el papelero es donde se encuentran los ejemplos de mayor impacto.
La optimización de procesos en el papel tradicionalmente se ha realizado con una mezcla de intuición y análisis tradicional.
Sin embargo, para llegar a analizar y optimizar un proceso complejo y multivariable, es necesaria una caja de herramientas más potentes, como los que presenta el método Six Sigma. Lejos de añadir complejidad, la aplicación del método Six Sigma simplifica el trabajo de los ingenieros de procesos de una fábrica de papel.
Pero, ¿en qué consiste el método?
Six Sigma es una metodología de mejora de procesos orientada a la toma de decisiones en base a la interpretación de datos, la cual resulta ideal para aplicaciones de procesos continuos.
¿Cómo implementar Six Sigma en una fábrica de papel?
Cognit Paper recomienda un proyecto de implementación estratégica. Se buscan algunos proyectos de impacto y se trata de formar a las personas relevantes en la empresa. Estos serían los pasos:
- Formar e implicar a dirección.
- Identificar algunos proyectos con retornos cuantificables y en línea con la estrategia de la empresa.
- Identificar a las personas adecuadas para recibir la formación.
- Realizar la formación en pequeños grupos.
- Hacer seguimiento individual para cada uno de los proyectos.
Cognit Paper centra la implementación en la ejecución de proyectos, asegurando así el retorno de la inversión.
La formación Six Sigma impartida por Cognit Paper se adecua a los estándares de IASSC, organismo regulador de los contenidos del método Six Sigma – ver anexos. Una vez finalizada la formación, los participantes pueden presentarse a un examen y obtener una certificación (Yellow Belt, Green Belt o Black Belt).
